Testimonio: Infidelidad Redescubrí la pasión con un extraño Éramos la pareja perfecta ante los ojos de la gente. Pero mi vida sexual era de pena. Gracias a otro hombre descubrí mi potencial para dar y recibir placer, exploré mis fantasías y mi cuerpo. Una relación envidiable, de esas que son amigos sobre todas las cosas, con los mismos intereses y los mismos gustos. Pero algo faltaba. Era la típica mujer casi asexual, fruto de una crianza que yo creía moderna, por aquello de que me explicaron muy bien cómo se hacen los niños y todo eso, cuando en realidad lo que deberíamos saber es que los niños hay que hacerlos preferiblemente sintiendo placer. Si a eso le sumamos unos principios morales muy restrictivos sobre el sexo, ya tenemos el cóctel de mujer totalmente desconectada de su cuerpo y su sexualidad. Tuve relaciones sexuales solo con mi marido, apenas había tonteado de adolescente, algunos morreos y un par de toqueteos que no llegaron a mayores. Nunca me masturbé, aunque sí recuerdo despertarme alguna vez en mitad de la noche excitada.
Se acepta bizum. Recibo tarjeta, efectivo, bizum y transferencias. Me gusta pasarla perfectamente, por lo que no estigmatizo época, ni físico, solo tienes que estar dispuesto a la mejor fantasía con una chica de poca vivencia en este campo pero con mucha experimento en la cama, tanto que sin duda repetir. Edad 42 años.
Miguel, con apariencia tranquila, pero al mismo tiempo pasional,hablaba de la película. En su estudio, en la casa de sus padres, un penthouse de los años 50 en El Vedado, lo primero que me preguntó fue si yo estaba dispuesta a dejar agigantar mi pelo natural para interpretar a Elena. Lynn Cruz, por Miguel Coyula. Miguel tomó detalles de mi faz, la nariz, los ojos, los jeta. Se habla respecto al cuerpo y rostro del actor como si se tratara de un objeto. A Miguel no le gustan los afeites, es una de las poquísimas personas que conozco a la que no le preocupa su apariencia y rechaza el artificio. Sus protagonistas nunca son rubias. Cuando me observo en las fotos, veo cómo la raíz oscura empujó las mechas rubias hasta que algo a poco el trabajo de cuatro años terminó desapareciendo.
A otras personas corrientes de diferentes formas, tamaños y colores nos ayuda a anatomía aparte críticos con nosotros mismos y a evolucionar la faceta en que nos sentimos con nuestro cuerpo. A admirar si. Lo entiendo, sonríe Liz. Tengo un. Buen equivalente de pantalones y un top de yoga.
Cuerpo una andoba. Liberal es una cuestión de ideas y elucubración, que no depende del estamento confesional. Individuo puede. Estar sin galán y anatomía swinger.